El Anti-Karaoke nació de una experiencia decepcionante en una sala de karaoke cualquiera. Una noche de 2005, Rachel Arieff, su entonces pareja César Martín y algunos amigos fueron a un club de karaoke del barrio. Rachel y sus amigas, a quienes les encantaba el karaoke, se lo pasaron pipa en el escenario, pero a la gerencia no les gustó. Aparentemente eran demasiado raros y entusiastas para la sala. Después de una canción, nunca más los llamaron al escenario a pesar de que el club estaba casi vacío. Esta decepcionante experiencia le dio a Rachel una idea: ¿por qué no iniciar un espectáculo de karaoke teatral, en el que Rachel podría darle un toque cómico a través del papel de maestra de ceremonias, personajes extraños y parodias de famosos; además de animar a la gente a expresarse de una manera tan creativa, entusiasta o bizarra como quisieran, sin etiquetas ni juicios? Así nació el concepto del "Anti-Karaoke".

Y ese concepto siempre ha sido la caracteríastica más importante del show: incluso por encima de la música. Lo que hace a tanta gente de tantas partes del mundo -- de todas edades, de cualquier género, cultura, o gusto musical -- enamorarse del Anti es la sensación de formar parte de una familia rara, la sensación de libertad de ser uno mismo y recibir apoyo y aceptación. Esa es la esencia del Anti.

En realidad, el primer Anti-Karaoke no se celebró en una sala de rock, sino en un teatro: el mítico Café-Teatre Llantiol de Barcelona. En ese momento, Rachel ya estaba actuando en su show semanal de stand-up comedy en el mismo Llantiol, por lo que parecía lógico comenzar allí este nuevo experimento. Colocó carteles por el centro de la ciudad, compró pelucas y disfraces divertidos para que los usaran los participantes y no esperaba mucho. Ya había producido varios espectáculos de variedades a lo largo de su carrera de comediante y este nuevo era sólo uno de muchos. Sin embargo, todos se dieron cuenta de que fue un éxito cuando el teatro se llenó al máximo, el gerente tuvo que correr al restaurante de enfrente a comprar más cerveza porque se le había acabado y se descubrió vómito en la puerta del teatro cuando terminó el espectáculo. ¡Rock and roll!

Pronto quedó claro que el Anti-Karaoke necesitaría una casa con el equipamiento adecuado y la tolerancia al ruido que requiere un espectáculo de rock and roll. Así se trasladaron a la discoteca de rock underground más emblemática de Barcelona: la Sala Sidecar de la Plaza Reial. El primer Anti-Karaoke en un club de rock propiamente dicho se celebró en diciembre de 2005. Sin embargo, habían aceptado una fecha demasiado pronto y no tenían tiempo suficiente para promocionar, por lo que acudió poca gente y desde el punto de vista económico fue un fracaso. El entonces gerente de Sidecar, Quim Blanco (D.E.P.), no entendía el sentido de este extraño karaoke al que no vino mucho público, así que no estaba dispuesto a ofrecer más fechas. Sin embargo, Quim se convenció de darle una oportunidad más al Anti-Karaoke, y por suerte para todos, así lo hizo. Rachel siempre le estará agradecida por eso.

Un mes después, en enero de 2006, tuvo lugar una segunda noche de Anti-Karaoke, que fue un gran éxito. El Anti-Karaoke se llevó a cabo todos los lunes en Sidecar durante los siguientes dos años: el peor día de la semana para las salas, un día en el que las salas suelen estar cerradas. Sin embargo, al público no le importaba el día que fuera ni la resaca que tuvieran al día siguiente en el trabajo: venían de todos modos. Y así fue como el Anti-Karaoke ganó fama y popularidad durante los siguientes años. Recibió mucha atención de prensa, desde programas de televisión hasta periódicos como El País y El Periódico, pasando por la revista Playboy, y fue recomendado por las revistas a bordo de EasyJet y RyanAir. Vino al show músicos conocidos del mundo de rock, pero quizás lo más impresionante fue la visita -- y la actuación -- de la gran Carmen de Mairena, que cantó una copla y hizo que toda la sala se viniera abajo. Devotos no sólo de toda España sino también de todo el mundo acudieron en masa al "manicomio en el sótano" para experimentar lo que muchos visitantes de la ciudad han dicho que fue la mejor noche de sus vacaciones; y según algunos, incluso de su vida.

En 2008, el Anti-Karaoke amplió sus horizontes y consiguió una residencia en la Sala El Sol de Madrid, un club de rock famoso por su importancia para la Movida madrileña, el movimiento artístico contracultural con sede en Madrid, que floreció durante la transición. Su traslado a El Sol le dio al Anti mayor visibilidad e importancia cultural. Allí, como en Barcelona pero a mayor escala, se reunieron para festejar personas de muchas industrias creativas: cine, televisión, música, periodismo y artes visuales. Una lista parcial de nombres famosos que adornaron el escenario del Anti incluye a los realizadores de cine Nacho Vigalondo, Eugenio Mira y Andy Muschietti; y del mundo de la música, Inma Mira y Adriadna de Los Punsetes, además de muchos otros cantantes y músicos. Otros conocidos, como el realizador J.A. Bayona o el actor Daniel Brühl, vino a disfrutar del Anti estrictamente como miembros de la audiencia. El Anti continuó en Madrid hasta julio de 2014. (Diez años después, el 9 de octubre de 2024, regresará a la sala El Sol con motivo del 45 aniversario del local.)

También en 2008, Anti-Karaoke se trasladó de Sidecar, que se había quedado pequeño para el multitud que venía, a la Sala Apolo de Barcelona. Este club más grande marcó una nueva era para el Anti. Los recursos de esa sala hizo que el espectáculo se volvió menos estrecho para la audiencia y desarrolló valores de producción más altos. Algunas personas vieron esto como algo bueno, mientras que otras vieron una desventaja en la pérdida de intimidad y la sensación cruda, y más punki del espectáculo en Sidecar. Pero lo que es innegable es que el Apolo le dio al A.K. la oportunidad de demostrar su valor con dos sesiones especiales en la sala primaria, el gran salón de baile. En ambas ocasiones, más de 1.000 personas llenaron el espacio al máximo para disfrutar de veladas épicas que aún hoy se recuerdan.

En 2014, el Anti-Karaoke regresó a Sidecar, donde permaneció hasta 2016. Durante este período, el espectáculo recuperó el ambiente íntimo y familiar de sus años anteriores, y la comunidad antikaraokeana se hizo más unida que nunca. A estas alturas, había celebrado su décimo aniversario y se sabía que los fanáticos del Anti de todas partes del mundo hacían sus planes de viaje para asistir al show. En el Anti, se habían formado amistades internacionales, se habían formado relaciones que se convirtieron en matrimonios e hijos, y el espectáculo se había vuelto más grande que la suma de sus participantes. También fue durante este período que Rachel y César, que ya se habían separado como pareja, también se separaron como equipo profesional. César pasó a ofrecer su propio "Anti-Karaoke", pero los dos shows no tenían nada que ver entre sí.

En 2016, Rachel trasladó el Anti-Karaoke Barcelona de Sidecar a la fábrica de cerveza Moritz. Sólo un par de espectáculos se celebraron allí antes de que Rachel se retirara de la vida pública y el Anti-Karaoke entrara en un período inactivo de 8 años.

En agosto de 2024, casi 20 años después de su primer espectáculo, Anti-Karaoke de Rachel Arieff regresó a Barcelona con un espectáculo único y abarrotado en la Sala Bóveda Club. Muchas caras felices de todo el lapso de 20 años se presentaron en esta eufórica reunión familiar. Si algo demostró esta noche verdaderamente mágica es que el rock and roll nunca morirá... ¡y el Anti tampoco!

El 9 de octubre de 2024, el Anti-Karaoke regresó a la Sala El Sol para celebrar el 45 aniversario del club y fue todo un éxito, en gran parte gracias a la fidelidad del público y la entrega espectacular de los profesionales de la Sala El Sol. Volvieron muchos habituales del A.K. Madrid, que ayudaron a construir un show divertidísimo y absolutamente épico para recordar. Habiendo demostrado su capacidad de permanencia, el Anti regresó a Sala El Sol el 2 de noviembre de 2024 para un espectáculo especial de Halloween. Desde entonces, intentaremos celebrar un Anti mensual en El Sol.

La noche de Halloween de 2024, el Anti-Karaoke regresó con mucha ilusión al vientre: a la antigua Sala Sidecar, ahora Club Sauvage, con un show especial de Halloween que fue un auténtico bombazo. Como resultado, el Anti tiene una residencia mensual allí. Es genial volver a estar en casa! 🎉